VISITA A LA COMUNIDAD DE AFAGNAN

  • Contenido subido a esta web el 12 noviembre 2025.
  • Visita de la Consejera General, Mercè Montells, a Afagnan (Togo).

VISITA A LA COMUNIDAD DE AFAGNAN

El día 10 de octubre, siguiendo con el calendario previsto, nos ponemos en camino emprendiendo la última ruta de nuestro itinerario por las comunidades del Congo y de Togo, llegando así a la comunidad de Afagnan. Una comunidad cercana a Lomé situada más hacia el interior. Allí nos esperaba nuestra hermana Georgette Lawson que, con gran alegría, nos da la bienvenida. A lo largo del día nos vamos situando y reconociendo los espacios de la casa, sus alrededores y saludando también a las hermanas Constance Amegan y Agnès Oladokun que van llegando a la comunidad después de su jornada de trabajo, haciéndose presente entre nosotras el gran gozo de encontrarnos y de poder compartir como familia este tiempo. Al día siguiente se nos brinda la posibilidad de participar en una celebración en la catedral de Aneho, sede de la diócesis a la que pertenece nuestra comunidad de Afagnan. Todo ello con motivo de los 40 años de ordenación sacerdotal del obispo de esta diócesis. Un momento para acercarnos al contexto cultural, eclesial y religioso de la zona viviendo una bonita celebración, animada por un magnífico coro y con alguna danza típica y momentos de alabanza que nos permiten ir descubriendo esta realidad, sus valores y la belleza en la manera de expresarse. Finaliza el encuentro con una mesa compartida.

A lo largo de la semana, junto a las hermanas de la comunidad de Afagnan, vamos conociendo la misión que llevan a cabo en el pueblo. Con nuestra hermana Georgette visitamos el colegio, situado en el mismo recinto de la comunidad. Un colegio que atiende a alumn@s de infantil y primaria. Es ella quien se encarga de la gestión y administración del mismo y junto con el director y los profesores dan respuesta a las necesidades educativas del lugar. El lunes 13, en el espacio habitual de inicio de la jornada que hacen con tod@s l@s alumn@s, nos sorprenden con una bonita bienvenida que acompañan del fragmento de un canto en español. Agradecemos este gesto sencillo y sincero de cariño y cercanía.

Descubriendo la vida de la comunidad, nos desplazamos al hospital que los hermanos de San Juan de Dios tienen en Afagnan para conocer la misión que las hermanas realizan allí y el espacio donde pasan su jornada de trabajo atendiendo con ternura y delicadeza a los enfermos, que a lo largo del día van llegando. Constance, es la responsable del servicio de la clínica y Agnès, recién llegada a esta comunidad e iniciando su trabajo como enfermera, está en el servicio de pediatría. Agradecemos la labor que junto con otr@s vamos realizando en bien de aquellos que más necesitan ser cuidados y sanados.

En la mañana del jueves 16 de octubre, visitamos el santuario mariano de Togoville, situado al lado del lago Togo, disfrutando y recreando la vista con los bonitos paisajes que nos ofrece y regala la naturaleza. Desde nuestro compartir la vida-misión con la comunidad de Afagnan, hemos podido ver que, como la casa tiene un bonito entorno con posibilidades de trabajar el campo y tener también un poco de granja, orientadas por Ibrahim, que es el responsable de la huerta, tienen plantadas cebollas, picante, yuca, con un buen número de gallos, y ya están pensando en un nuevo proyecto con gallinas ponedoras… todo ello con la posibilidad y finalidad de vender y poder obtener algunos recursos económicos para el colegio y la comunidad. Cuando tienen mucha cosecha le ayudan también algunas mujeres, que son mamás de alumn@s del colegio. Esto ha generado en ellas el poder descubrir que con poco espacio en sus casas y haciendo un pequeño trabajo de campo pueden tener también un beneficio para sus familias. Esta manera de cuidar la madre tierra y lo que nos ofrece el entorno que realiza la comunidad, va teniendo un efecto multiplicador en el pueblo. Muchos han iniciado su pequeña cosecha poniendo luego a la venta lo recolectado.

El día 19 de octubre y después de dos meses recorriendo las comunidades del Congo y Togo, finalizamos esta etapa con el corazón agradecido por el camino andado, por las relaciones y vínculos que crecen y se fortalecen, por la experiencia de sentirnos navegando en la misma barca. Damos GRACIAS a la comunidad de Afagnan por los momentos compartidos, por la posibilidad que nos han dado de acercarnos a la misión que, desde el silencio, desde lo sencillo y pequeño van realizando en medio de su gente. Gracias porque es educando y sanando como vamos saliendo al encuentro de las situaciones de pobreza del entorno, ofreciendo nuestros panes y peces y todo nuestro ser, con la certeza que, cuidar amando es lo que nos mueve hoy, nos dinamiza y anima para continuar extendiendo el Reino allí donde estamos.